lunes, 1 de enero de 2024

VIVIR EN EL ENSUEÑO.

 Después de tanto llorar,

después de llorar tanto

quise escapar del quebranto

y volar, como vuela el viento,

por ese mundo ideal

que construyo con mis versos.

Y aunque tengo la certeza 

que los demonios del miedo

no inclinarán su cabeza

por alto que sea mi vuelo,

yo seguiré adelante

sin olvidar ni un instante

que esos demonios del miedo

nunca podrán alcanzarme

si no detengo mi vuelo;

con eso tengo bastante.