viernes, 20 de mayo de 2011

La mendiga de mi calle. **

La mendiga de mi calle
es menuda como una alondra.

Solo tiene treinta años
y parece la más vieja del barrio.

No tiene malos sentimientos,
ni mala lengua, ni malas artes.
Solo tiene hambre.

Sus ojos, antes cráteres encendidos,
ahora son lagos profundos
donde se muere la tarde.

Todos los días la veo
acurrucada en la acera,
pero no reparo en Ella
por esa costumbre de verla
como parte del paisaje.

Vosotros podeis mirarla,
pasar cerca o deteneros a su lado
porque es inofensiva y discreta.

Pero si levanta la cabeza
y extiende su mano suplicante,
entonces se vuelve peligrosa
¡ Huid, volved a vuestras cosas,
pasad de largo !

O se meterá en vuestras vidas
y sus ojos serán como puñales.

sábado, 7 de mayo de 2011

Hoy me quedo aquí. **

Hoja a hoja y verso a verso he ido desgranando en estas " Palabras de lino " a trocitos mi alma
y un vendaval de nostalgias se ha esparcido por sus páginas. Tal vez haya llegado hasta vosotros
como" Una bocanada de aire fresco ". Ese era mi deseo. Pero a mí me ha dejado un sabor agridulce
y una lágrima colgada.
La primavera se me ha ido por una calle muy larga y esta resaca de vivir ¡ Ha dejado tan fría mi casa !



Pero no voy a bajar al mar
ni voy a subir hasta el cielo
a buscar las flores muertas
para encender una hoguera.
Hoy me quedo aquí,
asomado a esta ventana
viendo caer la lluvia.
Y aunque sueñe mi cuaderno
que camino por sus páginas
como antes caminaba;
hoy me quedo aquí,
asomado a esta ventana
que da a esa calle tan larga
sintiendo una suave caricia,
como un beso de luna;
la brisa sobre mi cara.