Silencio, se rueda.
Aquí un hombre ciego,
las lágrimas tiemblan.
No lleva la brújula
de la cosa cierta.
No hace camino
¡ Tan quieto se queda !
Solo el miedo anda
detrás de su pena.
Aquí está una niña
¡ Qué cerca, qué cerca !
Juguetea saltando,
a la cuerda, cuerda.
El sol y sus ojos
la misma moneda.
Alejadme el plano,
necesito verla,
allí, junto al ciego,
tan quieto de pena.
Que vaya delante
saltando a la cuerda,
que arroje al camino
del sol, su moneda.
Encended las luces,
la toma, se cierra.
Ya el ciego camina
detrás de su estrella.
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