lunes, 28 de julio de 2014

Tristeza. **

En estas noches del estío
presiento absorto la mirada
de aquella luna tan blanca
que rielaba por los cielos
encantados de mi infancia;
y aún me arranca
algún suspiro
y aún me arranca
alguna lágrima.
Por eso, como el niño
al que imponen un castigo;
le pregunto muy bajito
a mi almohada:
¿ Por qué, por qué ?
¿Dime por qué,
estos sueños tan bonitos
me dejan tan triste el alma ?

2 comentarios:

  1. Pinceladas de nostalgia que revisten la palabra de belleza. Un abrazote!

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  2. Gracias Carlos. Abrí el libro de la vida y cual fue mi sorpresa que en esa página estaba yo de muchacho y el cielo de entonces seguía siendo el mismo de ahora, las mismas estrellas, la misma luna blanca....Y vinieron los recuerdo; y vinieron los sueños... Y llegó el poema. Un abrazote.

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